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Un plan ambicioso para cerrar la brecha en la educación temprana y el cuidado infantil

La educación temprana y el cuidado infantil de alta calidad prepara a los niños para toda una vida de oportunidades, alivia la carga de las familias trabajadoras y valora adecuadamente a los proveedores que ayudan a establecer la base de la vida de nuestros niños. Pero a pesar de años de promesas, en Boston ha persistido una enorme brecha en la educación temprana y el cuidado infantil–y la pandemia solo ha subrayado esta realidad.

Necesitamos un liderazgo audaz y urgente para resolver nuestra crisis de cuidado infantil. Massachusetts es el segundo estado más caro del país para la educación temprana, con un costo anual promedio de $15.095 para un niño de 4 años y $20.913 para un bebé––casi un tercio del ingreso familiar promedio de Boston. Los proveedores de cuidado y educación temprana en Massachusetts––una fuerza laboral que es predominantemente de mujeres, personas de color e inmigrantes––ganan un promedio de solo $24.980 al año, aproximadamente un tercio del salario de un maestro de escuela primaria. Los bajos salarios conducen a una alta rotación de personal, lo que altera la consistencia y estabilidad que proporcionan la base para que los niños aprendan, impide que muchos proveedores de cuidado infantil desarrollen una carrera satisfactoria en este campo, y desalienta a los aspirantes a proveedores de ingresar al campo.

En 2017, más de 14,000 de los niños de Boston de 0 a 5 años de edad no tenían acceso a un asiento de cuidado y educación temprana disponible––un número que incluye al 74% de todos los bebés y niños pequeños. La brecha es particularmente aguda en ciertos barrios, liderados por Dorchester, East Boston, West Roxbury y Charlestown. Incluso antes de la pandemia, Boston había estado perdiendo asientos de cuidado y educación temprana con licencia, y particularmente aquellos en programas basados ​​en la familia.

La educación y el cuidado de la primera infancia son un bien público y requieren inversión pública. Boston debe aprovechar los recursos de la Ciudad y nuestra red existente de proveedores basados ​​en la familia y en el centro para implementar el prekínder universal para todos los niños de 3 y 4 años y una atención asequible y de alta calidad para todos los bebés y niños pequeños; e invertir en proveedores como profesionales, creando un flujo de talento para satisfacer las demandas de la próxima generación. Al elevar el bienestar de los niños y las familias a la máxima prioridad de City Hall, podemos hacer que Boston sea una ciudad para todos.

Creación de una ventanilla única para la inscripción y el acceso

Necesitamos un sistema de educación temprana que funcione para todas las familias de Boston, no sólo para las más privilegiadas. La Ciudad debe simplificar el acceso y la inscripción para las familias, los recursos para los proveedores, y proporcionar datos actualizados regularmente para la responsabilidad pública.

  • Crear una Oficina de Educación Temprana y Cuidado Infantil. Una Oficina de Educación Temprana y Cuidado Infantil (EEC), dotada de personal y recursos, compartirá los recursos con los proveedores, se coordinará con organizaciones sin fines de lucro, albergará datos relevantes y servirá como guía para las familias de todos los orígenes para navegar por la educación temprana y el cuidado infantil en Boston.

  • Agilizar la inscripción y la comunicación. Navegar por el panorama de la educación temprana es una tarea difícil, especialmente para los nuevos papás. El año pasado, casi el 20% de los asientos en programas comunitarios quedaron vacíos. La Oficina de EEC creará un sitio web y una línea telefónica multilingües y fáciles de usar para que las familias inscriban a sus hijos en asientos de educación temprana dentro de BPS y en programas basados ​​en centros y familiares alineados con BPS. Las brechas entre la lotería de prekínder, la lotería de asignación escolar regular y el proceso de solicitud de los centros comunitarios crean confusión y estrés innecesarios para las familias, y perpetúan las desigualdades raciales. La alineación de los cronología de inscripción garantizará que todas las familias sepan cuáles opciones están disponibles para ellas y permitirá una estrategia coordinada de comunicación por toda la ciudad.

  • Comparta datos en tiempo real para una accesibilidad total. Navegar por el vasto y complicado panorama de opciones, disponibilidad, costos y subsidios de educación temprana es una pesada carga para los papás que trabajan con tiempo limitado. La Ciudad debe integrar datos a nivel municipal, estatal y federal para crear una ventanilla única para los padres que buscan información, vales u otra asistencia financiera, y comunicarse de manera proactiva con todos los nuevos papás en Boston para ofrecer ayuda.

  • Ofrezca recursos de código abierto para proveedores. La Oficina de EEC trabajará en asociación con organizaciones locales sin fines de lucro para servir como un centro de recursos para proveedores actuales y potenciales, incluso el intercambio de herramientas de planificación empresarial; ejemplos de políticas, procedimientos y manuales; recursos pedagógicos; oportunidades de networking para la colaboración informal; y afiliación y descuentos para herramientas educativas en línea. La plataforma de Shared Services ofrece algunos de estos recursos a proveedores; Boston debería crear una plataforma adaptada al contexto de nuestra comunidad local y garantizar la accesibilidad lingüística total. Proporcionar kits de bienvenida a los programas familiares recién licenciados ayudaría a los proveedores a navegar por sus opciones de administración financiera y comercial.

  • Organice comunidades vecinales de aprendizaje. La Oficina de EEC organizará redes basadas en el barrio de proveedores de educación temprana––en BPS, programas basados ​​en el centro, y programas familiares. La organización del barrio ayudará a los proveedores a acceder a información actualizada, adaptarse a las circunstancias cambiantes, compartir las mejores prácticas y oportunidades de desarrollo profesional y construir comunidad.

  • Aproveche las instituciones culturales de la Ciudad. La Oficina de EEC ayudará a conectar a los proveedores de educación temprana con los museos, bibliotecas y otras instituciones culturales de la Ciudad para aumentar la exposición de los niños pequeños a la historia, el arte, la música y otras experiencias prácticas de aprendizaje.

Ofreciendo accesibilidad y accesibilidad universal y de alta calidad

A través de la coordinación de la Ciudad y la inversión pública, brindaremos prekínder universal para niños de 3 a 5 años y opciones de educación temprana asequibles y de alta calidad para todos los bebés y niños menores de 3 años de la ciudad. Ampliaremos drásticamente el sistema de asientos de educación temprana de Boston dentro de las Escuelas Públicas de Boston (BPS), y en asociación con programas basados ​​en el centro y programas familiares para ofrecer flexibilidad a los padres.

  • Conecte BPS con los programas familiares existentes en la comunidad. Nuestras opciones actuales de prekínder para niños de 4 años han demostrado que los programas basados ​​en el centro y BPS pueden trabajar juntos para brindar una experiencia educativa adaptada a las necesidades de desarrollo únicas de los niños pequeños. Expandir estas asociaciones para incluir programas familiares generará más recursos a proveedores dedicados y experimentados basados ​​en la familia, fortaleciendo el compromiso de Boston de garantizar que los educadores tempranos reciban beneficios y salarios acordes con sus pares de BPS, al tiempo que traen familias con bebés y niños pequeños a la comunidad de BPS––y los programas existentes administrados por los principales empleadores de Boston han demostrado que este modelo puede funcionar.

  • Invierta en la creación de nuevos programas de educación temprana. Para crear suficientes asientos para satisfacer las necesidades de todos los niños pequeños de Boston, la Ciudad debe realizar inversiones específicas en programas basados ​​en el centro y programas familiares alineados con BPS. Ofrecer espacio libre de alquiler en edificios municipales e instalaciones públicas a proveedores sin fines de lucro, y brindar asistencia con el alquiler, los pagos de hipotecas o los costos iniciales a los proveedores familiares creará nuevos asientos de educación temprana, al tiempo que ofrece ahorros de costos que pueden pasarse a familias con niños menores de 3 años a través de una estructura de tarifas de escala móvil.

  • Reconozca a los proveedores de educación temprana como profesionales. La ciencia es clara en que la educación temprana proporciona una gran cantidad de beneficios cognitivos, sociales y académicos a los niños. Los educadores tempranos deben ser valorados por el trabajo que realizan. La inversión de la ciudad en programas de educación temprana alineados con BPS garantizará que todos los educadores de nuestra comunidad reciben buenos salarios, fuertes beneficios, protección en el trabajo y oportunidades continuas para el desarrollo profesional, mitigando la rotación de personal, proporcionando la estabilidad y consistencia que es la base por la que aprendan los niños, y atraer a la profesión los jóvenes apasionados y otros educadores aspirantes.

  • Priorice las alianzas en los desiertos de educación temprana. Partes de East Boston y Hyde Park y otros barrios con una alta proporción de niños pequeños de Boston se consideran desiertos de educación temprana. La expansión de nuevos centros de educación temprana en asociación con BPS debería comenzar en estos barrios con mayor necesidad.

  • Extender los estándares de alimentación buena a los centros de educación infantil. Con la adopción del Good Food Purchasing Program en 2019, BPS se ha comprometido a obtener alimentos que cumplan con los estándares rigurosos y determinados por la comunidad relacionados con la calidad nutricional, la equidad racial, la sostenibilidad ambiental, una fuerza laboral valorada, la economía local y el bienestar animal. La extensión de estos estándares a los programas de educación temprana asegurará que los niños pequeños de Boston tengan una exposición temprana a alimentos nutritivos y hábitos saludables.

Construyendo una trayectoria profesional sostenible de educación temprana y cuidado infantil 

Al invertir en educadores tempranas tanto en programas familiares como en centros, y al apoyar a los emprendedores que buscan lanzar nuevos programas, podemos ayudar a las familias trabajadoras de Boston al mismo tiempo que fortalecemos las oportunidades de pequeñas empresas para una fuerza laboral de educación temprana que se compone principalmente de mujeres, gente de color e inmigrantes.

  • Crear una fuente de talento a través de programas de educación vocacional y universitaria. Boston tiene la suerte de tener universidades públicas y colegios comunitarios con una gran experiencia en educación temprana y cuidado infantil. La Oficina de EEC facilitará las asociaciones entre estos programas y proveedores para brindar oportunidades continuas de desarrollo profesional. La Ciudad también debería explorar la creación de una pista de educación temprana en Madison Park Technical Vocational High School para que los estudiantes sigan carreras en educación temprana, siguiendo el modelo de programas exitosos en otras escuelas secundarias vocacionales en la región que capacitan a proveedores y apoyan a las familias locales.

  • Reducir la burocracia para los programas familiares. Los programas familiares de educación temprana son generalmente más asequibles que los programas basados ​​en centros más grandes, sus horas tienden a ser más accesibles para las familias con horarios de trabajo no tradicionales, y algunas familias prefieren su entorno más pequeño. Debemos facilitar el éxito de estos programas, incluso proporcionando programas de capacitación multilingües en línea, abogando por cambios regulatorios a nivel estatal para simplificar el proceso de certificación y reembolso, e implementando cambios inmediatos en Boston––por ejemplo, los proveedores de educación temprana ya no deberían tener que buscar la aprobación de la Junta de Apelaciones de Zonificación (ZBA) para iniciar programas familiares.

  • Apoye los programas en Boston Housing Authority. Debemos asegurar de que todos los administradores de propiedades de BHA comprendan que los residentes de BHA pueden ser proveedores de educación temprana con licencia basados ​​en la familia y trabajar para hacer que el espacio común esté disponible para que los proveedores aspirantes cumplan más fácilmente con los requisitos de licencias estatales.

  • Amplíe el Childcare Entrepreneurship Fund. Este programa proporciona becas y asistencia técnica para apoyar a los proveedores familiares existentes como empresarios y propietarios de negocios. Debemos expandir este programa para incluir asistencia para el lanzamiento de nuevos programas de cuidado infantil, llegar a todos los proveedores de Boston, aumentar el tamaño de cada beca, incorporar capacitación en habilidades digitales y garantizar que los proveedores de educación temprana reciban apoyo a largo plazo.

  • Trabaje con los propietarios y desarrolladores para hacer que la vivienda sirve para el cuidado infantil. Consideraciones arquitectónicas menores, como hacer que el baño sea visible desde la cocina y tener dos puntos de entrada, pueden alinear las unidades residenciales con los requisitos de licencias estatales para los proveedores familiares. La Ciudad debe incorporar estas consideraciones en el proceso de aprobación de desarrollos y trabajar con los desarrolladores y propietarios para facilitar que los aspirantes a proveedores familiares obtengan su licencia.

Ofreciendo cuidado accesible e inclusiva para TODAS las familias de Boston

La educación temprana y el cuidado infantil deben satisfacer las necesidades reales de las familias de Boston, incluso los papás que no tengan un horario de 9 a.m a 5 p.m, las familias sin hogar y las personas con discapacidades.

  • Proveer opciones para los papás que trabajan en horarios no tradicionales. Las iniciativas locales como el Independent Women’s Project ayudan a llenar las brechas para los papás que trabajan en industrias con horarios no tradicionales, como hotelería, servicio de alimentos y construcción. Debemos asociarnos con empleadores, sindicatos y otras iniciativas de proveedores en estos sectores de rápido crecimiento para garantizar que todos los papás que trabajan tengan acceso a opciones de educación temprana de calidad, asequibles y confiables, y brindar incentivos para que los proveedores abran durante horas no estándares, incluso para los papás que trabajan turnos de noche.

  • Ampliar la labor de los colectivos de educación temprana y cuidado infantil. Los colectivos como el Greater Boston Childcare Collective son organizados directamente por los papás y tienden a estar ubicados en el hogar. Estos programas llenan las brechas en el cuidado y tienen un enorme potencial para satisfacer las necesidades de los papás particularmente vulnerables, incluso las familias sin hogar.

  • Garantizar la inclusión en políticas y programas. Por toda la diversidad de las familias de Boston, todos los programas de educación temprana y cuidado infantil deben satisfacer las necesidades de los niños con discapacidades y de los que aprenden inglés––que muchas veces no reciben los servicios adecuados más adelante en sus carreras educativas. La región de Boston tiene muchos programas de posgrado para proveedores de educación temprana, incluso programas de aprendizaje experiencial centrados en la enseñanza de estudiantes del idioma inglés. La Ciudad debe involucrarse en la creación de asociaciones con estos programas de capacitación para garantizar que todos los proveedores tengan el conocimiento, la capacitación y el apoyo que necesitan para ofrecer una educación de alta calidad a los niños pequeños con discapacidades y aquellos que hablan un idioma diferente al inglés en casa.

  • Incrementar la educación sobre los recursos disponibles para las familias sin hogar. La Ciudad debe proporcionar programas educativos para los proveedores de educación temprana sobre los vales para reducir cualquier estigma y la probabilidad de que un proveedor de cuidado infantil rechace a una familia por usar un vale. La Ciudad debe proporcionar información fácilmente accesible y digerible sobre el sistema de vales y las opciones de educación temprana para las familias sin hogar para garantizar que todas las familias, proveedores y refugios conozcan los servicios disponibles para ellos––incluso el Head Start, que brinda servicios integrales a niños sin hogar sin costo para la familia.

  • Proporcionar transporte sin tarifa para familias sin hogar. El transporte es un obstáculo importante que impide que las familias sin hogar accedan a la educación temprana y otros servicios. La Ciudad debería trabajar con los refugios para proporcionar pases MBTA gratuitos a los papás, siguiendo el modelo del programa para estudiantes de BPS de 7° a 12° grado, para facilitar a las familias que navegan por tránsito complicado entre refugios, trabajos y programas de educación temprana.

Usando la autoridad de la Ciudad para construir lugares de trabajo amigables para la familia

La educación temprana basada en el lugar de trabajo ofrece a los padres la flexibilidad y la tranquilidad de que sus trabajos se ubiquen junto con el cuidado de sus hijos. Para los empleadores, eliminar las barreras para que los empleados equilibren las responsabilidades familiares ayuda a reclutar y retener una fuerza laboral productiva.

  • Fortalecer las regulaciones de Inclusión de Guardería (IDF). El código de zonificación de Boston requiere que los desarrolladores de grandes proyectos comerciales en ciertos distritos dediquen una parte del espacio de oficinas a una instalación de cuidado infantil o construyan tales instalaciones fuera del sitio––pero las regulaciones obsoletas ya no reflejan las realidades de la economía de Boston. Para extender los beneficios de este programa a todas las familias trabajadoras de Boston, debemos reducir el umbral mínimo de pies cuadrados que activa la IDF y ampliar su alcance por toda la ciudad, especialmente a los distritos que se han convertido en centros comerciales en los años desde que se promulgó la ordenanza de la IDF. La Ciudad también debe crear un Fideicomiso de EEC donde los desarrolladores puedan dirigir los pagos de la IDF en lugar de proporcionar directamente un espacio para la educación temprana y el cuidado infantil, similar al programa de linkage. El Fideicomiso de EEC se puede utilizar para reducir el costo del cuidado para las familias en programas alineados con BPS y expandir el Childcare Entrepreneurship Fund.

  • Hacer cumplir las obligaciones existentes de la IDF. Para maximizar los beneficios públicos, la Ciudad debe trabajar con el BPDA para hacer cumplir las obligaciones existentes de la IDF. A largo plazo, una oficina independiente del cumplimiento de un departamento de planificación pública de la ciudad debe supervisar el cumplimiento de las regulaciones más robustas de la IDF junto con el programa de linkage y otros compromisos de los desarrolladores, lo que garantizará que la educación temprana y el cuidado infantil se consideren parte de la infraestructura cívica necesaria para que los nuevos desarrollos funcionen.

  • Amplíe las opciones de atención en el lugar a los trabajadores contratados. La educación temprana en el lugar del trabajo brinda flexibilidad a los papás que pueden trabajar de manera irregular o durante muchas horas. Sin embargo, este beneficio generalmente sólo está disponible para los empleados directos de la empresa, excluidos los contratistas. Boston debe utilizar el proceso de beneficios comunitarios de PILOT para garantizar que las instituciones grandes sin fines de lucro que ofrecen educación temprana en el lugar también extiendan estos beneficios a sus trabajadores contratados y subcontratados, como el personal de limpieza y los trabajadores del servicio de alimentos, y explorar incentivos similares para los empleadores en el sector privado.

  • Muestre el liderazgo de la Ciudad como empleador. Algunos papás que trabajan para la Ciudad tienen acceso al programa de cuidado infantil de City Hall de BCYF, lo que demuestra la conveniencia del cuidado infantil en el lugar de trabajo. Los empleados de la Ciudad también tienen derecho a hasta seis semanas de licencia parental remunerada, uno de los programas de licencia remunerada más sólidos del país. El Departamento de Recursos Humanos debe realizar una revisión para garantizar que todos los empleados puedan utilizar los beneficios parentales a los que tienen derecho e implementar nuevas políticas basadas en las mejores prácticas en torno a la programación flexible para apoyar a los trabajadores con responsabilidades familiares. La Ciudad debería convocar y reconocer a los empleadores privados con regularidad para fomentar la adopción de políticas similares en el sector privado.

Construir coaliciones para la educación y el cuidado de la primera infancia como bien público

El liderazgo urgente requiere aprovechar nuestro poder para amplificar las voces de la comunidad para presionar por un cambio sistémico y audaz a nivel municipal, estatal y federal.

  • Apoyar la organización del lugar de trabajo. Los sindicatos locales como SEIU 509 y BTU y las coaliciones nacionales como la National Domestic Workers Alliance están haciendo un trabajo tremendo en defensa de los trabajadores de educación temprana, que son desproporcionadamente mujeres de color. Las fuertes protecciones laborales federales garantizarían que estos trabajadores tengan derecho a la autodeterminación y un asiento en la mesa de formulación de políticas.

  • Abogando por la legislación estatal propuesta para limitar los costos de educación temprana. Un nuevo proyecto de ley propuesto en la legislatura de Massachusetts haría que ninguna familia gaste más del 7% de los ingresos del hogar en educación temprana y cuidado infantil. El cuidado sería gratuita para las familias de ingresos más bajos y se proporcionaría con una tarifa variable para las personas de ingresos medios. La legislación cuenta con el apoyo de una coalición de activistas y grupos empresariales.

  • Profundizar las alianzas con el sector privado. Trabajar con el sector privado para crear fuentes de financiamiento adicionales podría ayudar a aumentar tanto la oferta de programas de educación temprana como los salarios de los proveedores sin aumentar los costos para las familias. Los líderes del sector privado de la región de Boston han señalado recientemente que planean contribuir a las soluciones de educación temprana y cuidado infantil en Boston. El financiamiento con bonos de impacto social demuestra que las inversiones en educación temprana muestran una tasa de rendimiento constante. Al aprovechar el financiamiento de bonos de impacto social y otras fuentes privadas de financiamiento, la Ciudad puede aumentar sus inversiones tanto en asequibilidad como en oferta.

  • Aumentar la financiación de la Child Care and Development Block Grant. El estímulo federal propuesto en el Congreso incluye $15 mil millones para fondos de CCDBG, que Massachusetts podría usar para expandir los subsidios ofrecidos a las familias o aumentar los salarios de los proveedores. Esta inyección de fondos ayudará a estabilizar el sector de la perturbación más inmediata causada por la pandemia, pero no solucionará la economía subyacente. Debemos seguir abogando por soluciones sostenibles a largo plazo.

  • La educación temprana universal como bien público. COVID-19 ha demostrado cómo la educación temprana es el eje sobre el que descansa cualquier otro elemento de la sociedad. Con el apoyo bipartidista para una mayor inversión pública para que el cuidado infantil sea realmente asequible, ahora es el momento de tomar medidas audaces. El próximo proyecto de ley de infraestructura federal debe reconocer la educación temprana como infraestructura cívica esencial, al igual que K-12.